La petjada del diable (La pisada del diablo)

Esta leyenda narra la historia relacionada con el diablo y Sant Antoni Abad, quien vivía en Sant Miquel de Solterra.

Hace muchos años, en el pico de Sant Miquel de Solterra, había Sant Antoni Abat y un diablo. De vez en cuando jugaban a las cartas encima de una piedra. Sant Antoni, en cada jugada, hacía 31 puntos, mientras que el demonio solo hacía 30.

Hasta que un día, el diablo, cansado de perder, lanzó una carta con tanta furia que rompió la roca. Al mismo tiempo dio un salto y es por eso por lo que su huella quedó marcada. Así pues, este lugar se llama La petjada del dimoni.